“Parte de mi misión de vida es compartir las enseñanzas del Ayurveda, conectándolas con la realidad cotidiana para mirar la vida con sabiduría, comprender el cuerpo, la mente y abrazar nuestros aprendizajes. “
María Fernanda Bueno
Wah, cuál es la historia detrás?
Mi nombre es María Fernanda Bueno, te voy a contar la historia del Wah.
Ocurrió desde la sincronicidad, como todo! Había regresado muy movida de la India. Recibí una propuesta de trabajo en el área de Recursos Humanos de una prestigiosa aseguradora. Tentador pero, al mismo tiempo, no podía ignorar un dolor interno, un vacío, un no sentirme cómoda con mi vida, mi cuerpo y mi camino. Tenía profundas inseguridades como Mujer, me habían sacado la vesícula con apenas 22 años, tenía momentos de depresión sin una aparente causa, no sentía pertenecer a nada, a nadie. No tenía una dirección. Mi única certeza, estar tomando decisiones de vida desde la carencia y la confusión, así que puse freno a la propuesta y rechacé la oferta.
De pronto, empecé a sentir un llamado, una urgencia interna. La vida respondió a eso ofreciéndome un espacio en una pequeña ONG que trabajaba, en ese entonces, en promoción de salud, y sistematizando la medicina andina, construyendo una relación con el Ayurveda. Ahí conocí a mi primera mentora, Mariana Galarza, una doctora homeópata que me enseñó a mirar el cuerpo con otros ojos, borrando el límite entre él y mi mente. En esa pequeña biblioteca encontré, mágicamente, los primeros libros del Ayurveda y con ellos las respuestas a preguntas y experiencias vividas.
Empecé a comprender que todo tiene un para qué. Ese fue el comienzo de la travesía de “hacerme cargo de mis aprendizajes”. Esta sensación de estar a cargo, me liberó del estado de dolor y confusión que me ahogaban y con este combustible empecé a estudiar, a viajar, a conocer maestros, médicos y mentores del Ayurveda, la Psicología y la Sanación que me permitieron ayudar a otros compartiendo esta hermosa información aplicada a Occidente. Así, nacimos con pequeños cursos en mi casa en el 2008 y en el 2013 abrimos este espacio virtual y físico.
Wah es una palabra en sánscrito que significa sorpresa, éxtasis, sentir gozo y de ahí se deriva el WOW. Así, nos sentimos cada vez que hacemos una nueva comprensión, que profundizamos en nuestros aprendizajes y sanamos.
Hoy muchas historias de transformación se han escrito en este espacio. Aquí se han gestado manos sanadoras, mentes claras, un equipo de personas y una creciente Comunidad de brazos abiertos comprometidos con nuestros procesos personales, siempre en actitud de servicio y aprendizaje.
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